que tristeza ver lo que pasa en mi país

Hay situaciones que te llenan de vergüenza, aunque sea ajena. Pero en mi país hoy se dió una situación que en verdad me llena de pánico. Hoy el Congreso elegía directorio nuevo. Se dieron las componendas de siempre y por lo tanto ganaron los de siempre, con sus nuevos aliados.  No es tampoco que yo piense que la Alianza por Costa Rica es la tapa del perol, pero duele ver que ahora si, este gobierno chungo nos tiene agarrados del pescuezo. Que el paquetazo fiscal  y todo lo que se les ocurra vendrá, porque estos carajos solo piensan en sacarle la plata al pueblo, no a los ricos.

Pero la pena no es por la payasada del Congreso (por ejemplo ver la plata que gastan en ropa, como si por ir bien vestidos lavaran su puercas conciencias!)

La pena es por este pueblo. Que sigue soportando la mediocridad gobierno tras gobierno y que nos reímos, sacamos chistes, porque pensamos que "al mal tiempo buena cara"

Evidentemente somos una sociedad enferma. Y bien lo dijo el cara´e´barro del nuevo presidente del Congreso:

"Solo soy el reflejo de esta sociedad" (lo dijo en Telenoticias y casi me ahogo al oír su declaración)

Pero inmediatamente me pongo a pensar (luego de madrearlo!) y me doy cuenta con tristeza que el descarado este tiene toda la razón, el es el reflejo de nuestra sociedad, llena de apatía, de "porta a mí", de chorizo, de corrupción, de "pobrecito". Vaya no es tan burro el sinvergüenza! 

Claro si los burros somos los que votamos por ellos pero más burros lo que no votan porque ya ni les interesa su país. Nos dejamos que nos llenen de miedo, que nos roben la esperanza y luego nos dejan con más impuestos y menos ilusión de hacer las cosas a derecho.

Lo que me llena de pánico es ver que nadie se inquieta. Ya estamos "domesticados" como nos dijo el mayor y más descarado maestro de todos estos ladrones. Domesticados. Todos sabemos que tiene que pasar algo. No podemos seguir en este mundo inventado que nos creemos. Hay gente que no tiene más que una sopa Maggi para comer en su casa, que sus paredes son bolsas de plástico. Campesinos a los cuales una Multinacional les compra en una miseria su único terreno. Peones enfermos por el efecto de los plagicidas de las piñeras. Niños sin oportunidad de estudiar pues en su pueblo no llega un maestro. Indígenas que son desplazados de sus territorios por falta de papeles, sin opción a proteger nuestra naturaleza y su identidad cultural. Ancianos abandonados como perros en ancianatos de miseria. Desempleados. No quiero seguir. Porque hace tiempo siento miedo de nuestra realidad. Miedo de no poder aportar nada al cambio que ocupamos.