martes, septiembre 19, 2006

Lluvia, tejido y té

La tacita tan mona se la robé al guapo Gustavo A, el que es tan dulce me la cedió con dulzura!

Hoy he tenido un ratito libre pues la Peque fue a casa de una vecina a jugar, como sigo empatinada con el shrug he aprovechado y tejí acompañada de una tacita de té
y una lluvia copiosa. Mientras tejo pienso en lo diferente que era la vida antes de aprender a tejer, siempre he tenido aficiones (lectura, punto cruz, jardinería, madera country, velas) pero desde que tejo veo menos TV y dedico menos tiempo a cosas que a fin de cuentas no me resultan edificantes, he cambiado tanto ya no me da pena cuando viajo en autobús sacar mi tejido y dar unas vueltas o lo llevo a las visitas familiares.... en fin intento sacar ratitos y tejer lo más posible, aunque ya me pasó la "fiebre tejeril" de desear tejer todo el día (la realidad hay que afrontarla: los quehaceres no se hacen solos!!!), el deseo de tejer sigue vivo.
Cuando tejo experimento una tranquilidad que raya en escapismo, caray! que el mundo se me puede caer pero, con el tejido en las manos todo se ve diferente, sé que no soy la única que conoce este fantástico sentimiento, no solo las que tejen si no las que hacen cualquier actividad manual lo han experimentado........quisiera describirlo mejor pero no puedo por hoy.
Lo único que quiero que entiendan es que para mí, el tejido es una manera de ser mejor cada día, de enaltecer el espíritu, de plantearme objetivos y alcanzarlos.

7 comentarios:

andrea dijo...

Yo creo que muchas compartimos esos sentimientos contigo. Sabemos que tejer no es un pasatiempo común, sino algo que enriquece nuestra vida de muchas maneras y una de ellas es poder conocernos y compartir nuestras experiencias.
El shrug va creciendo y se ve muy bonito, te felicito!

Karen dijo...

Te entiendo perfectamente, yo no tengo otros vicios más que el tejido y es que cuando me pongo a hacerlo me desconecto, me olvidó de los 100 problemas que traemos en la cabeza y me concentro en disfrutar... el color, la textura, en imaginarme el resultado...

Jules dijo...

Es estar en medio de una presa, sentada en un bus, y saber que en vez de amargarte la vida, es una oportunidad idónea para avanzar un poco más en el proyecto que tenés en manos.

lanas y tramas dijo...

Querida ammortus, sabés que se relaciona el tejido con el yoga? Al igual que el bordado, tiene que ver con la repetición, y esto es lo que lo hace tan gratificante. Hay un artículo muy interesante en el blog Fuzzy galore, donde escriben acerca de todo esto.

Paula460 dijo...

Pues no se si sere la unica... pero no he sentido escapismo cuendo tejo. Porque siempre estoy haciendo otra cosa mientras tejo. Para mi es una suerte de alivio a una inquietud interna que siento...todo el tiempo. No soporto estar haciendo una sola cosa a la vez. Tejer me calma esa intranquilidad. Por eso tejo mientras espero, tejo mientras veo la tele, tejo mientras escucho a mis hijas. Es que las manos me comen si no tejo!
Deber ser por aquello que mencionan las chicas: tejer es una especie de mantra.
Y me encanta ver los resultados. A pesar de haberlo hecho montones de veces... siempre me preguntop como es pocible que un kilometro de cuerda se puede tranbsformar en una prenda de abrigo...
me trae al mente a esas mujeres que hacian TELAS maravillosas en la antiguedad... como es posible? me parece casi alquimico: transformar una fibra como el algodon o el lino en un tela... es para quedare pasmado... y hace miles de años????

marujims dijo...

comparto tu sentir con respecto al tejido para mi tambien es un balsamo y me ayuda a dejar de darle vueltas a cosas que no puedoo solucionar, tal vez por que siempre estoy contando y no puedo perder el hilo, ademas de la satisfaccion de ver el trabajo terminado es algo especial

marie dijo...

que lindo post escribiste en dia de lluvia.
Me hacen mucho sentido tus palabras, así como la percepción del tejido como un mantra, que es el que provoca ese estado de relajación. Cuando más he tejido ha sido en los momentos más dificiles, de soledad, se podria decir. Estoy totalmente conciente de que el tejido fue mi terapia.
Hace ya varios varios dias que no tejo, la cotidianeidad a veces me consume (las cosas no se hacen solas, ya lo dices!), pero SÉ que existe una forma de organizar la vida que si me permitirá hacer algo que me enriquece tanto. Solo espero encontrarla pronto.
un abrazo muy grande.